Kandylight
Instalación interactiva que propone una experiencia sinestésica experimentando con la luz, el color y el sonido
Instalación interactiva que propone una experiencia sinestésica experimentando con la luz, el color y el sonido
Videojuego cooperativo en el que los jugadores a través de la comunicación, podrán superar los retos de una serie de mini-juegos
Colaboración con Matics para la creación de una maqueta interactiva que muestra los datos de los diferentes servicios que prestan los departamentos de la Diputación de Barcelona.
Lluna es una interfaz táctil no-fontral que permite la interacción y observación colectiva en todo su contorno. Estas características permiten que ésta sea, entre otras cosas, un instrumento interactivo que propone un acercamiento a la música y las formas gráficas a través de la experimentación lúdica.
Theos es nuestra primera mesa interactiva. En ella invitamos a los usuarios a jugar moviendo sobre la mesa objetos físicos, los cuales crean nuevos elementos o situaciones en la escena ayudando o obstruyendo la meta de sus personajes.
Datástrofe es un videojuego desarrollado dentro del marco de Interactivos?17, residencia de artes digitales de Medialab Prado, durante mayo del 2017. Este, reta al jugador a superar una serie de catástrofes y adversidad generadas en tiempo real a través de la recolección de datos de emisiones de gases contaminantes, ruido ambiental y intensidad de tráfico.
Nuestro primer proyecto de VR, y cómo no, tenía que ser un juego. En El Laberinto de Cristal te transportamos a un laberinto repleto de estanterías de cristal, llenas de objetos y vajillas de cristal, deberás atravesarlo para encontrar la salida recogiendo por el camino todos los snacks y juguetes que puedas! Y cuidado, no toques nada!
MoireBox formó parte del Sonar Innovation Challenge 2017. El desafío de Red Bull Amapiko fue acercar la música a las personas con discapacidad auditiva. Nos enfocamos en crear una experiencia, traduciendo los sonidos a vibraciones visuales y táctiles. Trabajando con varios tipos de motores, mapeamos los tonos bajos y altos en las 120 cuerdas que componen la caja, el efecto moire se completó con la pantalla retro-proyectada que mostraba gráficos generados a tiempo real que respondían en color y movimiento a los sonidos reproducidos. Se comporta como un altavoz, al enchufar un dispositivo a su mini-jack, la MoireBox crea una experiencia personalizada de cualquier música o sonido.